La Comisión Europea ha presentado recientemente unas medidas dirigidas a terminar con la producción de plásticos y la contaminación que producen estos materiales en ríos, mares y océanos.
Entre las medidas que Europa está dispuesta a poner en funcionamiento, están prohibir la fabricación de objetos de un solo uso, como bastoncillos de higiene personal, cubiertos, platos, vasos, etc…
Las medidas tienen como objeto terminar con los 10 productos más dañinos para el ecosistema marino, por ser estos los más habitualmente encontrados en las playas y en los aparejos de pesca. Este conjunto de materiales plásticos nocivos, son más del 70% de la basura marina, según el gobierno europeo de Bruselas.
La intención del ejecutivo europeo es reducir a la mitad los desperdicios de estos productos que ocasionan al medio ambiente daños por valor de 230.000 millones de euros en 2030 y lo que aún es peor, la contaminación de 3,4 millones de toneladas de Co2
Se prohibirán todos los productos ahora fabricados en plástico que tienen alternativa viable económicamente y de fácil accesibilidad para el gran público, como son bastoncillos, cubertería, platos, pajitas para beber, agitadores de bebidas y varillas de globos, esto deberán ser fabricados con materiales exclusivamente con materiales sostenibles. O sea, esto productos no desaparecerán, pero deberán ser su materiales otros distintos al plástico.
Los envases de bebidas deberán de estar fabricados de tal forma que los precintos y tapones formen parte del mismo cuerpo de la botella y se exigirá que el 90% de los producidos sean reciclados.
Como todo el mundo sabe las bolsas de plástico deberán ser pagadas desde el 1 de Julio obligatoriamente, para que este hecho retraiga su consumo, esta es solo la primera de las medidas que la comisión europea quiere poner en marcha con impuestos que graven la producción delos objetos de plástico, además que obligar a las empresas productoras a sufragar las campañas de concienciación del publico en que los objetos de un solo uso no son una buena opción y hasta contribuir económicamente a la limpieza de los ecosistemas marinos.
El plástico no es una buena opción para la Unión Europea y su total prohibición cada vez está más cerca.