“Un cliente puede tener su automóvil del color que desee, siempre y cuando desee que sea negro”, mítica frase que Henry Ford escribió en su autobiografía y que ha pasado a la historia como una de sus más famosas citas. Pero, ¿sabías que, de hecho, los primeros automóviles fabricados por Ford no eran negros?. El cambio radical hacia el negro fue hacia 1914, pero no tuvo nada que ver con premisas estéticas, sino más bien con las ideas de Ford sobre un sistema de trabajo en cadena y una producción masiva que permitiese reducir costos.
Esta filosofía, en la sociedad actual, sería totalmente impensable. Nos es imposible imaginar que, al comprarnos un coche, una prenda de vestir, un mueble, un electrodoméstico, etc…no podamos elegir el color